Las redes sociales cumplen en el escenario político un doble papel, por un lado pueden presentarse como una plataforma que ayude al personaje en cuestión a dar un mayor impacto a su programa y por otra parte, pueden convertirse en su peor enemigo. Son numerosos los ejemplos de comentarios desafortunados que han provocado reacciones diversas de todo el mundo ensalcen o critiquen los mismos, el más reciente la imitación que Toni Cantó publicó este martes de los problemas de dicción de Mariano Rajoy. El número de seguidores en Twitter se ha convertido en un nuevo baremo de medir los apoyos que tiene un político. Antes se predecían las posibilidades de los candidatos por la asistencia de público a los mítinis, hoy hay muchas y muy diversas herramientas para llevar a cabo este cómputo.El estudio publicado por Twiplomacy muestra que el líder político más seguido en las redes sociales es Barack Obama, y lo es con una abismal diferencia, 34.519.950 seguidores frente a los 7.200.332 followers que tiene el Papa Francisco, que ocupa el segundo puesto del ránking. Pese a no ser el más seguido el Pontífice sí el líder más influyente de la red social ya que cada mensaje que publica en español es retuiteado una media de 11.116 veces y cada tuit publicado en inglés recibe una media de 8.219 retuits, frente a los 2.309 retuits de media que tiene por cada tuit el presidente estadounidense.
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