Una mujer española discapacitada y con problemas económicos ha decidido subastar sus órganos no vitales para poder pagar el alquiler. La señora de 44 años ha puesto a la venta uno de sus riñones, córneas, un pulmón y un trozo de hígado.
A ver cómo acaba la historia…Todo parece fácil, pero la valenciana se enfrenta a 12 años de cárcel por “tráfico ilegal de órganos” si finalmente vende sus órganos.
Ella misma ha dicho que lo único que quiere es un hogar, un trabajo que pueda hacer y dinero para que su hija pueda estudiar.
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