El pez arquero es una especie única con un arma letal: es capaz de utilizar un potente chorro de agua para atacar a sus presas. Ahora, un equipo de investigadores de la Universidad de Milan acaba de desvelar todas las claves de su estrategia mortífera. El pez no utiliza, como se pensaba, órganos internos, sino que usa mecanismos externos y se aprovecha de las propias características del agua.A diferencia de otros animales como el camaleón o la salamandra, que sí utilizan órganos internos para propulsar su lengua, el pez arquero'modula' el agua que escupe para que aumente su velocidad a medida que viaja desde la boca del pez hasta su presa.El pez presiona la lengua contra el agua en su boca y forma una especie de cañón propulsor. Posteriormente cierra las branquias para forzar la salida del chorro que llega a lograr una fuerza seis veces mayor que su potencia muscular.
martes, 30 de octubre de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario